Café: ¿beneficioso y perjudicial?

El café es una bebida consumida en el mundo entero, muchas personas tienen una adicción total al café, tanto que no pueden empezar el día sin una tacita de café, es una bebida altamente energética que es uno de los más grandes vicios de la humanidad, pero que tan malo o bueno puede ser? Veamos aquí.

 

El café tiene muchísimas propiedades, puede ser bueno y malo a la vez, por ejemplo tomando café puro a la mañana con el estómago vacío puede causarnos acidez e irritación de la mucosa del estómago, pero no es todo tan malo como parece.

 

Esta bebida mejora la atención y la concentración, además de mejorar el poder de reacción de una persona. La combinación de cafeína y glucosa es la que activa esas áreas del cerebro.

 

Si sos de las personas que sufren de presión baja, una tacita de café es suficiente para levantarte la presión. Ahora bien no es recomienda en personas que tienen taquicardias. Ya en personas medio hiperactivas que están acostumbradas a tomar café, éste ya no les afecta porque su organismo se adaptó con el tiempo y no reacciona subiendo la presión.

 

 

Según estudios científicos tomar café ayuda a reducir el riesgo de muerte prematura. La cantidad ideal de tacitas de café es tres al día. El café ayuda a cambiar el funcionamiento del sistema inmune, haciendolo más saludable. Fortalece el corazón, al hígado y el tracto gastrointestinal, lo ideal es tomar un cafecito reción molido, porque los solubles no tienen todos los nutrientes saludables y además están llenos de químicos que son malísimos para el tracto intestinal.

 

Para las personas que sufren de dolores de cabeza, y las mujeres somos más propensas a esto por nuestros cambios hormonales; la cafeína contenida en el café es capaz de eliminar el dolor de cabeza y la migraña, pero no tienen el mismo efecto que un analgésico, aunque sí puede ser bastante eficiente, café y analgésicos no es una buena recomendación pero puede funcionar, no hay que abusar nada más.

 

Generalmente las personas que están medio depre es porque la producción de dopamina y serotonina  que “provocan” el buen estado de ánimo están en baja. Una tacita de café y hasta solo su olorcillo delicios son suficientes para aliviar una situación de estrés. La cafeína es un estimulante del sistema nervioso central y eso evita que entremos en depresión. Pero sólo la cafeína del café tiene este efecto; la cafeína del té, las gaseosas o el chocolate no estimulan los nervios con la misma potencia.

 

El café funciona como estimulante en nuestros neurotransmisores, que mejoran nuestra memoria. Pero sólo funciona con memoria de corto plazo, aunque tampoco es tan malo porque justamente toda info se guarda primero en la memoria a corto plazo y, luego de una hora  terminan grabándose en la memoria a largo plazo, si las condiciones están dadas, o sea si prestate atención.

 

 

Ahora viene lo más genial del café ayudar a mantener y a reducir el peso. Cuando el nivel de la hormona leptina está bajo, el organismo almacena la grasa. Con la cafeína se aumenta su nivel. Entonces, los amantes del café no suben de peso tan rápido como el resto de las personas. Si lo acompañas con algún entrenamiento, los resultados van a ser mejores.