Activemos el metabolismo

Clave importante para sentirnos bien, para estar delgados y saludables es tener un buen metabolismo, debemos tomar en cuenta varios detalles, y estilo de vida, debemos activar nuestro metabolismo y poner en practica ciertas actividades.

Al acelerar el metabolismo, la grasa no tiende a almacenarse en el cuerpo y la persona no engorda. Cuando es lento, la grasa se almacena y la persona engorda. La tasa metabólica es la velocidad en que el organismo utiliza la energía disponible (o quema las calorías).

Ejercitarte y tomar agua de manera constante, existen diversas maneras de acelerar tu metabolismo y conseguir una mayor quema de calorías.

Desayunar despierta tu metabolismo, con lo que gastas más calorías a lo largo del día. Con un buen desayuno le estás dando a tu cuerpo todo lo que necesita para restablecerse tras el ayuno nocturno y tienes menos hambre el resto del día.

Tu cuerpo quema más calorías cuando hace la digestión de proteínas, que cuando digiere grasas o carbohidratos. Come alimentos ricos en proteína (carne de res magra, pescado, pavo, pechuga de pollo, tofu, nueces, frijoles, huevos, productos lácteos bajos en grasa).

Si lo que quieres es adelgazar, necesitas gastar al final del día más calorías de las que ingieres. Comiendo se gasta energía para absorber, transportar, almacenar y metabolizar los alimentos.

 

Los hombres suelen tener una tasa metabólica más alta que las mujeres, debido a que el cuerpo femenino tiene más grasa y menos músculo que el masculino. Sin embargo, también inciden la genética y tus hábitos de vida. Por lo que se requiere sobre todo de un cambio de actitud para conseguir acelerar tu metabolismo con buenos resultados.

El té verde es conocido por sus propiedades antioxidantes, pero también se ha descubierto recientemente que ayuda a acelerar el metabolismo, y con ello a perder peso rápidamente.

Para conseguir un mayor porcentaje de masa muscular no basta con el ejercicio específico, necesitas que la alimentación aporte aminoácidos para crear las proteínas que forman los músculos. Escoge alimentos ricos en proteínas con menor porcentaje de grasa como pollo, pescado y huevos.